En pleno descenso del primer pico de la pandemia en el país, que se alcanzó a finales de julio y comienzos de agosto, las autoridades de salud, encabezadas por el ministro Fernando Ruiz, han alertado sobre la posibilidad de que se presenten nuevas olas o repuntes de contagios en los meses de venideros.
El mejor ejemplo de este escenario es lo ocurrido en Europa, donde hoy ven un aumento de casos por encima del pico inicial; aunque –hay que decirlo– la mortalidad se ha mantenido relativamente estable.
“Vamos hacia una alta probabilidad de rebrotes, como sucede en Asia y Europa”, señaló esta semana el ministro Ruiz durante el consejo directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que presidió.
En el caso colombiano, el ministro Ruiz ha sido claro en que si bien hay departamentos como los del Eje Cafetero y Tolima que aún no han alcanzado su punto máximo de contagios, esta eventual nueva ola nacional podría llegar hacia noviembre.
EL TIEMPO consultó a expertos en epidemiología y salud pública para que analizaran el escenario de una segunda ola y, principalmente, plantearan cómo contener una nueva embestida del coronavirus.
Para empezar, Luis Jorge Hernández, doctor en salud pública, aclara que en realidad no se debe hablar de rebrotes sino de nuevos brotes, pues en la segunda oleada se infectan quienes no lo hicieron en la primera. “Es de esperar que ocurra porque una pandemia se expande hasta agotar susceptibles. Van a aumentar los casos, pero habrá menos mortalidad ya que la mayoría será población más joven sin comorbilidad. No hay que asustarse, pero no descuidarse”, sentencia.
Dicho eso, algunos como Julio César Castellanos, director del Hospital Universitario San Ignacio, insisten en que la mejor forma de reducir el impacto es mantener las ya conocidas medidas de protección (uso correcto del tapabocas, lavado de manos, distancia social), “que cada vez demuestran más su eficacia para mantener la evolución de la pandemia controlada”.
Jorge Cortés, infectólogo de la Universidad Nacional, añade que la cultura ciudadana es un punto fundamental. “Se tiene que trabajar fuertemente en la educación de la población para hacer ese giro en la cultura ciudadana, mientras se cuida a los grupos de riesgo”, expone y agrega que eventualmente las cuarentenas deben seguir en ciudades pequeñas, donde deberían existir equipos de salud pública que refuercen estas estrategias.
El infectólogo Carlos Álvarez resalta que es clave el cumplimiento y la adherencia a los protocolos de bioseguridad elaborados por las autoridades para todos los sectores. “De nada sirve saber que debo usar tapabocas si no lo uso bien”, comenta.
Carlos Eduardo Pérez, también infectólogo, asegura que estas nuevas olas no dependen del comportamiento viral sino del comportamiento humano. “Esta situación siempre es patente no porque el virus tenga mayor alcance sino porque nosotros permitimos que nos alcance. Las reuniones familiares, el relajamiento de las medidas y la creencia ‘me siento bien por eso no trasmito’ es lo que más perjudica”, indica.
El secretario de salud de Bogotá, Alejandro Gómez, asevera que un segundo pico de la pandemia será una consecuencia que se debe esperar derivada de la reapertura de todos los frentes de producción, comercio, ocio y recreación, que era algo necesario. “Vamos a tener otro pico de la pandemia de manera inevitable y por eso no se debe prevenir sino mitigar con lo único que ha demostrado eficiencia: tapabocas, lavado de manos y distancia social y aplicando la estrategia de detectar, aislar y reportar casos. Si es así, pasaremos por el segundo pico sin amenazar el sistema de salud”, remata.
Aunque coinciden en que todo queda en la responsabilidad de la gente para aplicar las medidas, Pedro Cifuentes, experto en sistemas de salud, insiste en que eso tiene que ir de la mano de una rigurosa estrategia de rastreo de casos, identificación temprana de sospechosos, favorecer el aislamiento selectivo garantizándole a los afectados la posibilidad de alejarse de su trabajo sin complicaciones, además de vigorosas campañas de educación. “Las medidas provistas deben pasar del papel a la práctica en todo el país”, remata.
Fuente: El Tiempo │ Photo by Edward Jenner from Pexels